Mario Ian fue el encargado de tocar un set breve pero contundente, basado en sus discos ya editados y adelantando varias canciones de su próximo material de estudio. 

 

La Trastienda estaba armada con sillas y mesas, cosa que apenas se subió el pequeño Dave Ellefson terminó. “Vamos, pónganse de pie y vengan para adelante”, dijo el bajista para 

posteriormente tocar esas moribundas melodías de “Dawn Patrol”, primera canción que sirvió como intro. Le siguieron, entre otras, “Tornado Of Souls”, “Skin O My Teeth”, el poco tocado en vivo y parte del soundtrack original de la película de Arnold Schwarzenegger “Last Action Hero”, “Angry Again”, algunas canciones de etapa solista como “If You Were God”, más clásicos inoxidables como “Hangar 18” y la "local" “Symphony Of Destruction”, con el obligatorio “Aguante Megadeth” por parte de los presentes. Como el show estaba basado en “Basstory”, Ellefson se dio el tiempo para contestar algunas preguntas de los presentes relacionadas con su libro y algunos pequeños secretos de su bajo signature, traducción mediante de César Fuentes Rodríguez.

No faltaron canciones que el mismo Dave marcó como importantes para su vida artística como “Paranoid” de Black Sabbath y “Wrathchild”, de Iron Maiden. El final fue para “Peace Sells”, canción que quizás contenga la línea de bajo más importante de Ellefson en Megadeth.

Con la promesa de regresar pronto con Dave Mustaine y su banda, si pueden en el 2020, el virtuoso instrumentista cerró su presentación en La Trastienda, una de sus dos fechas en el país, ya que la otra fue el jueves 5 de diciembre en Club Tucumán de Quilmes.